Dubái, 26 jun (SANA) El enviado especial de Estados Unidos a Siria, Thomas Barrack, declaró que la principal prioridad de su país en Siria es alcanzar la prosperidad y la seguridad, combatir el terrorismo y erradicar al grupo terrorista Daesh, y agregó que Washington no interviene en la forma de gobierno del país.
En una entrevista con el canal Al Arabiya, Barrack indicó que Estados Unidos levantó las sanciones económicas contra Siria con el fin de ofrecer una oportunidad al país y permitir que su población se recupere.
“Cuando el presidente Donald Trump decidió levantar las sanciones contra Siria, en coordinación con el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman y el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan, el objetivo era brindar una oportunidad a Siria, no imponer un nuevo régimen, exportar democracia ni crear una nueva constitución. Se trataba de permitir que el pueblo sirio se reconstituyera y se recuperara con el apoyo regional, siendo Arabia Saudita un actor clave en este proceso”, añadió.
Barrack afirmó que fue el pueblo sirio, y no Estados Unidos, quien derrocó al régimen de Bashar Al-Assad. Confirmó que “la concentración y el conocimiento de la historia del presidente sirio Ahmad Al-Shara le permitieron pasar de combatiente a jefe de Estado, y nos comprometemos a permitirle demostrar su valía”.
Finalmente, Barrack negó cualquier intención o deseo del gobierno estadounidense de interferir en los asuntos de los países de la región, y señaló que la intervención en Oriente Medio ha sido históricamente infructuosa.