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Ámsterdam, 29 jul (SANA) Una serie de presiones internacionales han puesto de relieve el eficaz papel de Países Bajos en la lucha contra el genocidio israelí en curso en Gaza.
Tras convocar al embajador israelí en Ámsterdam para condenar la “insoportable” situación en Gaza y añadir a Israel a su lista de países extranjeros que representan una amenaza para la seguridad, Países Bajos ha anunciado la prohibición de entrada a los ministros israelíes Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich por su flagrante y reiterada incitación al asesinato de palestinos.
Dos instigadores de la limpieza étnica en Gaza
El anuncio del Ministerio de Asuntos Exteriores neerlandés, que prohíbe la entrada a los Países Bajos a Ben-Gvir y Smotrich y los inscribe en el espacio Schengen como “extranjeros no deseados”, se produjo en respuesta a la persistente incitación de ambos hombres contra los palestinos, su fomento de la violencia de los colonos y la expansión de los asentamientos, y sus reiterados llamamientos a la limpieza étnica en la Franja de Gaza como parte de la guerra de exterminio de Israel desde octubre de 2023.
Presión internacional en aumento
Las recientes medidas políticas de los Países Bajos, incluida la inclusión de Israel por primera vez en la lista de países que representan una amenaza para el país, formaron parte de una serie de crecientes presiones europeas para detener las violaciones israelíes en Gaza. Esta presión se manifestó en una crisis diplomática entre el primer ministro neerlandés, Dick Schoeff, y su homólogo israelí, Isaac Herzog, a raíz del apoyo de Ámsterdam a la suspensión de la participación de Israel en el programa de investigación Horizonte Europa y su amenaza de adoptar medidas económicas adicionales, incluyendo la restricción de la cooperación comercial entre la Unión Europea y la ocupación, si continúa la obstrucción de la ayuda humanitaria a Gaza.
Entre las sucesivas medidas diplomáticas adoptadas en respuesta a la negativa de Israel a detener su guerra de genocidio en Gaza se incluyen el anuncio del presidente francés, Emmanuel Macron, hace unos días, de que su país reconocería a Palestina como Estado durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York el próximo septiembre, y las declaraciones del Partido Nacional Escocés sobre la presentación de un proyecto de ley para reconocer a Palestina y forzar su votación si el primer ministro británico, Keir Starmer, continúa posponiendo esta medida.
Solicitudes de sanciones
Otras medidas recientes de miembros del Parlamento Europeo y de la Cámara de los Comunes británica han incluido peticiones de sanciones contra Israel y acciones inmediatas para detener el genocidio en Gaza. Estas peticiones fueron acompañadas por el anuncio de Brasil la semana pasada de que estaba finalizando su solicitud para unirse a la demanda por genocidio presentada por Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia.
Países Bajos y su responsabilidad especial
Si bien varios países han anunciado su deseo de unirse a la demanda de Sudáfrica, Países Bajos expresa una creciente preocupación por las amenazas de Israel contra la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya. Los Países Bajos han dejado claro previamente que, como Estado anfitrión de los principales organismos jurídicos internacionales, tienen la “responsabilidad especial” de proteger su labor de la interferencia externa.
Una medida sin precedentes
En un esfuerzo adicional por presionar a Israel, la Comisión Europea aprobó una propuesta para suspender la participación del Estado ocupante en el programa Horizonte Europa, con un presupuesto de 100 millones de euros, en respuesta al agravamiento de la catástrofe humanitaria en la Franja de Gaza.
El programa Horizonte Europa es una importante plataforma para la financiación de la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la cooperación internacional. Israel se unió como socio en 2021 en virtud de un acuerdo especial. Este programa se considera una de las herramientas más importantes de la UE para la innovación y la investigación transfronteriza.
Esta medida forma parte de un conjunto de opciones presentadas por el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) para responder al genocidio israelí en curso en Gaza.
