SANA en Español
Damasco, 9 ago (SANA) El gobierno sirio expresó este sábado su rechazo a la conferencia organizada por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) en el noreste del país, calificándola de “frágil alianza” impulsada por intereses externos y contraria a los principios de unidad nacional.
Una fuente oficial recordó que el Estado garantiza y protege el derecho de los ciudadanos a reunirse pacíficamente y dialogar, siempre que sea dentro de un proyecto nacional integral que respete la integridad territorial y la soberanía del país.
Asimismo, afirmó que los grupos religiosos o étnicos pueden expresar opiniones políticas, fundar partidos y celebrar reuniones, siempre que sus actividades sean pacíficas, no se enfrenten al Estado por la vía armada y no impongan su visión sobre la estructura estatal.
“El futuro del Estado no se decidirá mediante acuerdos entre facciones, sino a través de una constitución permanente aprobada en referéndum popular, que asegure la participación igualitaria de todos los ciudadanos”, indicó la fuente, subrayando que cualquier propuesta de reforma debe canalizarse por medio del diálogo público y las urnas.
El gobierno acusó a la conferencia de no representar un marco nacional integral, sino de agrupar a partidos perjudicados por “la victoria del pueblo sirio” y a actores que buscan monopolizar la representación política en el país bajo el statu quo, con apoyo extranjero.
En este sentido, Damasco condenó la acogida de “figuras separatistas involucradas en actos hostiles”, considerándola una violación del acuerdo del 10 de marzo, y responsabilizó plenamente a las FDS y a sus líderes de las repercusiones.
Finalmente, el gobierno sirio sostuvo que el encuentro en el noreste constituye un intento de internacionalizar los asuntos internos, atraer intervención extranjera y propiciar la reimposición de sanciones, cuyas consecuencias —advirtió— recaerán sobre las FDS.
