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Damasco, 13 de agosto (SANA) – Tras seis años de ausencia, la Feria Internacional de Damasco regresa en su 62.ª edición, programada del 27 de agosto al 5 de septiembre. El evento, considerado uno de los más antiguos e importantes de Oriente Medio, busca relanzarse como un referente económico, cultural, artístico y social para Siria y la región.
Fundada en 1954, la feria ha servido históricamente como escaparate para la producción nacional y como punto de encuentro entre comerciantes, industriales, inversores y empresas de diversos sectores. A lo largo de su historia, ha contado con la participación de numerosos países árabes y extranjeros, promoviendo intercambios comerciales, firmas de contratos de exportación y la apertura de nuevos mercados para productos sirios.
Un recinto de gran escala
El evento tendrá lugar en el Recinto Ferial Internacional de Damasco, que se extiende sobre 1,2 millones de metros cuadrados, incluyendo 70.000 metros cuadrados de pabellones cubiertos y 65.000 de espacios abiertos. Las instalaciones cuentan con pabellones temáticos —internacionales, nacionales, privados y de artesanía— así como un área dedicada a ventas.
Además, el recinto ofrece servicios para delegaciones oficiales y visitantes, áreas de prensa, estacionamiento para más de 3.000 vehículos, 350.000 metros cuadrados de zonas verdes, centro de salud, parque de bomberos, planta eléctrica y sistema de bombeo y desalinización.
Una cita para el intercambio global
Con su regreso, la Feria Internacional de Damasco aspira a reforzar la imagen de Siria como un país abierto a la cooperación internacional y al comercio global, ofreciendo una plataforma para el diálogo empresarial y cultural en la región.
